La presencia de sangre en las heces puede deberse a diferentes causas, la mayoría de las veces son hemorroides o fisuras pero también puede tener su origen en tumoraciones del tramo final del intestino por lo que siempre debemos consultar con nuestro médico.

La molestias en la región anal no siempre se deben a la presencia de hemorroides, por lo que se pueden aplicar mientras no le atiende su médico.

Se ha demostrado que una dieta rica en fibra con líquidos abundantes, ejercicio moderado y mantener un horario fijo para nuestras deposiciones nos ayudarán a prevenir la aparición de hemorroides.

El embarazo suele favorecer la aparición de hemorroides, debido al aumento de la presión intraabdominal y la tendencia al estreñimiento.

Un adecuado control del peso, realizar ejercicio moderado como caminar diariamente y una dieta que evite el estreñimiento, ayudará a que no aparezcan o lo hagan de un modo más leve. La aplicación de pomadas que contengan ácido hialurónico, los baños de asiento con agua tibia y aplicar gasas empapadas en una solución de agua fresca con azúcar 2 veces al día también son recomendables.

La incontinencia urinaria ocurre en la mayoría de los casos por la relajación de los músculos que sostienen los órganos que están en la pelvis, entre los que se encuentra la vejiga. Por medio de ejercicios específicos que deben realizarse siempre antes de los embarazos y a partir de la menopausia podemos mantener estos músculos en correcto estado y evitar la caída de la vejiga.

Hoy en día disponemos de métodos como la rehabilitación de suelo pélvico, la estimulación con electrodos aplicados sobre la piel, láser intravaginal y medicaciones para corregir la incontinencia sin tener que recurrir a la cirugía.